Los valores de Libres | Francisco Pascual
Los valores de Libres
FRANCISCO PASCUAL
LIBRES surge de la creciente preocupación de un grupo de personas por una insostenible situación política donde prima el sillón sobre el deber; el puesto en la lista sobre la lealtad a los que han confiado el voto; el partido sobre el gobierno; la ideología sobre las personas.
LIBRES no es un fin sino un medio para conseguir una sociedad donde lo fundamental son las personas y nuestra ideología es el sentido común. Somos conscientes de que una mayoría de “expertos” en política casi te obligan a definirte en este aspecto. No perderemos el tiempo explicando lo que alguno pudiera pensar que es una herejía, pero seguro que un ejemplo despejará cualquier posible duda: si una propuesta de VOX es buena, la apoyaremos; si una propuesta de PODEMOS es buena, la apoyaremos; si una propuesta de PP es buena, la apoyaremos; si una propuesta de PSOE es buena, la apoyaremos. Y por buena entendemos que lo sea para la mayoría de los ciudadanos, no para el partido. De la misma forma votaremos en contra de una mala propuesta, la haga quien la haga. A esta postura le pueden poner la etiqueta que deseen, pero es y será́ nuestra ideología. Algunos lo denominamos sentido común.
Derechos y obligaciones deben ser los mismos en cualquier parte de España y nadie debe tener privilegios ni carencias por el lugar donde reside"
LIBRES está compuesto por personas que se ven abocadas a dar un paso adelante debido a la manifiesta incapacidad de esos políticos profesionales, pues cobran por ello (algunos desde antes de la mayoría de edad y hasta la jubilación), para responder a cualquier cuestión que no sea su partido, su ideología o su puesto en las próximas listas. No somos profesionales de la política, sino profesionales que decidimos entrar en política. Esto no quiere decir que no haya gente valida en política, que hay sin duda, pero desgraciadamente suelen ser la excepción.
LIBRES viene para hacer POLÍTICA, esa actividad tan importante en la sociedad y tan denigrada por un conjunto de indeseables que nunca deberían haber llegado a ella. Sí, esa política en mayúsculas, clara, honrada y sin complejos, donde abiertamente se proponen lo que se pudiese considerar incompatible por algunos interesados pero que creemos no es el caso
Creemos en la igualdad de derechos y obligaciones como algo indisoluble, que no pueden ir unos sin otras y que los son de las personas, no de los territorios. Creemos por tanto que derechos y obligaciones deben ser los mismos en cualquier parte de España y nadie debe tener privilegios ni carencias por el lugar donde reside.
Creemos en la propiedad privada fruto del esfuerzo personal y en la necesidad de apoyar a las personas que deciden arriesgarse para generar riqueza en el país, y al tiempo creemos que debemos proteger a los trabajadores de cualquier abuso.
Creemos que las empresas necesitan incentivos para invertir y al tiempo que deben pagar impuestos y generar empleos de calidad. Los empresarios y los trabajadores no somos enemigos, debemos trabajar juntos para beneficio de ambos y nuestra política laboral va en esa línea.
Creemos que hay demasiados cargos públicos y debemos adelgazar la administración, especialmente el entramado que unos y otros han montado para colocar a los afines o a los que no han conseguido salir en las listas y al tiempo que necesitamos más personal en algunos servicios como Sanidad.
Creemos que debemos fiscalizar el enorme gasto en subvenciones sin control a diferentes entidades como institutos, fundaciones y ONGs varias para posibilitar que la indispensable ayuda destinada a las personas necesitadas les llegue y no se pierda en esas entidades.
Estamos asistiendo a un espectáculo donde unos políticos vividores de la política, buscan enfrentarnos con el objetivo de buscar votos para perpetuar su propio sillon"
Creemos que sindicatos, patronales y partidos políticos deben subvencionarse a través de sus afiliados y no con dinero publico y al tiempo creemos que se debería ceder espacio electoral en todos los medios públicos a todas las formaciones para que el ciudadano decida informado. Y no, no hay incompatibilidad en ello, a menos que sea ideológica; pero eso es problemas de otros.
Creemos en una Europa fuerte y unida, simplemente porque seria beneficiosa para sus habitantes, del mismo modo que creemos en una España fuerte y unida por el mismo motivo. Para LIBRES, lo importante son las personas, no los territorios.
Creemos firmemente en las libertades individuales y que deben ser respetadas las normas de convivencia, en nuestro caso reflejadas en la Constitución. Creemos que esas normas pueden y deben ser modificadas, pero no para el beneficio de unos pocos, sino para mejorar nuestras condiciones de vida en común. Y especialmente creemos que se debe reformar la ley electoral, para que todos los votos valgan lo mismo.
Creemos en el respeto de independencia de los poderes del Estado, pero también que se deben recuperar con medidas de control efectivas, especialmente la transparencia. En ese sentido, como ejemplo, proponemos la responsabilidad personal de los cargos públicos, sean electos o no, ante determinados actos como aeropuertos fantasmas, sobrecostes en obras publicas o enchufismo. La corrupción NUNCA debe quedar impune.
Creemos que la administración del Estado es mejor descentralizada por motivos puramente prácticos para el ciudadano, pero eso no debe convertirse en un revuelto de cortijos donde políticos sin escrúpulos usan a la población para sus intereses. También que debe tener el numero suficiente de personas necesarias para prestar los servicios sin que se convierta en un nido de enchufados del partido de turno.
Creemos que el idioma debe ser un mecanismo de unión que nos permita comunicarnos entre todos y al tiempo que es enriquecedor que haya personas que hablen otros idiomas, pero nunca un arma electoral ni una imposición partidista. Las Administraciones deben velar por el cumplimiento de la legislación y especialmente en Educación, protegiendo especialmente a esas futuras generaciones del reyezuelo de turno. El idioma de la Administración del Estado debe ser único, y lógicamente el español o castellano, permitiendo que cualquier persona con nacionalidad española pueda moverse sin problema por todo el territorio nacional y la integración laboral en cualquier lugar en igualdad de condiciones
Creemos que las competencias en Justicia, Sanidad, Educación e Interior deben ser del Estado porque evita situaciones de inseguridad, abusos y agravios comparativos que por desgracia soportamos hoy.
Creemos que las pensiones y la vivienda son derechos fundamentales de las personas y las Administraciones están obligadas a cubrirlos sin que ello suponga un abuso. Como decíamos antes, derechos y obligaciones deben ir de la mano.
Creemos que debemos tomar medidas para que nuestra industria, agricultura y ganadería se defiendan de productos más baratos que no cumplen muchas normativas sanitarias que aquí́ son obligatorias.
Creemos en una Sanidad Publica de calidad, dotada de medios y personal suficientes y sin enchufados políticos. Creemos en la obligación de prestar atención medica básica y de urgencias a cualquier persona que lo necesite, pero no a nuestra costa. Se deben arbitrar acuerdos internacionales para evitar los abusos de sobra conocidos y que los países de origen paguen por la atención prestada, igual que se hace con los españoles cuando nos prestan asistencia en sus países
Creemos que la Educación debe ser de gran calidad, sea publica o privada, y nuestra obligación es velar por el cumplimiento de unos elevados requisitos mínimos, tanto de profesionales como de medios. Para ello se deben estudiar sistemas educativos a largo plazo y no de cara al próximo periodo electoral o según la ideología del partido, tomando en cuenta a los profesionales como parte de su elaboración, y aprobado por los 3/5 del Congreso, asegurando así́ su mantenimiento.
Creemos en las libertades individuales, y que la religión es una de ellas, del mismo modo que creemos que las normas nos rigen a todos por igual y ningún precepto religioso está por encima de las leyes que permiten nuestra pacifica convivencia.
Creemos que el terrorismo en cualquier manifestación es intolerable y siempre nos tendrá́ en contra.
Para nosotros hay personas con diferente opinión, y no, el que opina distinto no es el enemigo sino alguien que puede aportar su diferencia al bien común. Es cierto que estamos asistiendo a un penoso espectáculo donde políticos profesionales, también conocidos como vividores de la política, buscan enfrentarnos con el único objetivo de buscar votos para perpetuar su sillón. Que no cuenten con LIBRES para ello. Creemos que se pueden y deben conseguir votos sin enconar rencillas, buscando lo que nos une que es mucho más que lo que nos separa.
Francisco Pascual