La crisis de la comunicación política | Víctor Píriz

La crisis de la comunicación política | Víctor Píriz

La crisis de la comunicación política | Víctor Píriz

La crisis de la comunicación política

 

VÍCTOR PÍRIZ

 

No se me ocurre mejor tribuna que esta para expresar lo que la crisis que vivimos está reportando a la comunicación y para analizar las causas que están llevando al Gobierno de España a fracasar estrepitosamente en su manejo.

En comunicación hay varios principios fundamentales, al menos en comunicación política.  En esta crisis se están soslayando todos. No se están teniendo en cuenta y afectan cada día más a la credibilidad de un gobierno que, si vemos las encuestas de este fin de semana sobre el manejo de la situación que atravesamos, está fracasando estrepitosamente, no solo en la resolución de la misma, que es un hecho incontestable, si no en su organización comunicativa.

En primer lugar, hay que trasladar credibilidad, una credibilidad que esté basada en hechos objetivos, y hay que hacerlo desde la humildad. Si alguien sigue las ruedas de prensa de Pedro Sánchez estas semanas, verá que lo más próximo a ese concepto es la desnuda arrogancia con la que se dirige a los españoles. Resulta cuanto menos curioso que en una crisis en la que están muriendo decenas de miles de compatriotas apenas tiene palabras para reconocer errores y dar consuelo a los familiares de las víctimas

Hay que trasladar credibilidad, una credibilidad basada en hechos objetivos, y hay que hacerlo, además, desde la profunda humildad"

Frente a eso, exhibe una arrogancia impropia con la situación que vivimos. Cuando más creíbles debemos de sonar los políticos, más alejados se hayan algunos de los ciudadanos de discursos repelentes, trufados de frases grandilocuentes y ridículas. La gente en sus casas, los españoles, nuestra gente, esa que está sufriendo, no quiere frases hechas, quiere frases creíbles. Y no las está encontrando cada vez que Pedro Sánchez lee en su telepronter.

Víctor Píriz, Diputado al Congreso por Badajoz y portavoz de presupuestos del Grupo Parlamentario Popular
Víctor Valentín Píriz Maya es Diputado en el Congreso por Badajoz y Portavoz de Presupuestos del Grupo Parlamentario Popular.
Es Licenciado en Administración y Dirección de Empresas, MBA por la Escuela de Organización Industrial y Master en Economía de Empresa y Trabajo por la Universidad de Extremadura.
Ha dirigido departamentos financieros de empresas regionales, nacionales y multinacionales. Ha sido Director y Subdirector de FUNDECYT.
Ha sido Concejal del Ayuntamiento de Talavera la Real, en Badajoz. 

En crisis de esta magnitud, al comunicar debes trasladar seguridad y conocimiento de los temas que tienes entre manos. El no enfrentarte a las preguntas abiertas de los periodistas, limitando tanto su derecho a informar como el derecho de los ciudadanos a saber, no hace sino ampliar aún más la brecha entre los políticos y los ciudadanos.

Que en pleno siglo XXI, con los medios electrónicos de que disponemos, el gobierno pretenda ocultar las preguntas incómodas y contestar solo aquellas que quiere contestar, ahondando más aún en los mensajes previos, es, sin duda, un error mayúsculo.

No pueden insultar así la inteligencia de los ciudadanos, porque los españoles son perfectamente conscientes que, cuando un dirigente no se enfrenta al escrutinio de la prensa es porque, o bien no conoce los temas, o bien no sabe lo suficiente como para someterse a preguntas sin filtro previo. O lo que es peor, no tiene seguridad propia, seguridad ni en lo que hace ni en lo que dice.

Aprovechar una crisis para limitar el derecho a la información de la prensa y limitar, como nunca antes en la historia de la democracia, el derecho a la legítima oposición y control al Gobierno por parte de los diputados y senadores en las Cortes Generales, traslada la sensación de que se está usando la crisis para algo más serio que para comunicar mal o no comunicar. Traslada la impresión de que se quiere aprovechar la crisis para un cambio de modelo de Estado, para un cambio en las reglas de juego que todos nos dimos hace más de cuarenta años. Supone, en definitiva, un error garrafal de un gobierno superado, de un gobierno que confió todo al poder de la comunicación política y no a la acción política.

Aprovechar una crisis para limitar el derecho a la información traslada la sensación de que se está usando para algo más serio que para comunicar mal o no comunicar"

Y cuando se vieron desbordados, cuando vieron que perdían la iniciativa comunicativa pese a tener la mayor parte de los medios controlados con publicidad institucional, cuando todo esto comenzó a pasar, cuando las mascarillas no llegaban, cuando los test que se compraban no funcionaban, cuando nada de lo que intentaban les salía bien, optaron por la peor comunicación posible: desviar la atención.

Y en esa fase estamos ahora en nuestro país. Echando la culpa de todo a unos falsos recortes del PP que los propios datos del Ministerio de Hacienda o la OCDE desmienten. Si para ello hay que pasear por todos los platós a un liberado sindical vestido de enfermero para la ocasión y candidato de Podemos como experto en los recortes sanitarios…se hace. Sin sonrojarse. Si hay que denunciar a Fiscalía que los mayores están muriendo abandonados en las residencias…se hace, aunque la propia Fiscalía lo desmienta en pocos días. Han llegado a un punto que todo les da igual, que utilizan cualquier instrumento, todos los medios a su alcance, todos mensajes y mensajeros, periodistas inventados incluidos, para desgastar a la oposición y salvar su desastre de gestión de crisis.

Rueda de prensa de Sánchez por el Coronavirus

Todo les da igual. Desde el gobierno se utiliza cualquier instrumento - medios, mensajes, mensajeros y periodistas incluidos- para desgastar a la oposición y hacerla responsable ante los ciudadanos"

Una estrategia errática que pasa también por situar en la boca de técnicos el mensaje más duro, descansando sobre ellos las malas noticias y los mensajes negativos con un lenguaje apenas entendible para la gente normal en sus casas que viven pegadas al televisor en busca de información y esperanza. Una estrategia de comunicación que pasa por obviar lo más duro de esta crisis que son las decenas de miles de muertos. Porque el desastre de gestión no tiene consecuencias inocuas. Muchos días perdidos por los test falsos, por la no llegada de equipos de protección individual, la falta de toma en consideración de las recomendaciones de la OMS en febrero que llegaron a permitir partidos de fútbol y la manifestación del 8M. Cada día que se ha perdido ha costado vidas. Pérdida de vidas que, en esta comunicación política, para escribir en los manuales de LO QUE NO HAY QUE HACER no se recuerdan ni se honran. No se habla de ellos ni se pone una sola imagen de los verdaderos damnificados de esta crisis. Una comunicación que se queda en el envoltorio pero que no tiene mensaje, es imposible que llegue a nadie.

Y frente a ese desbarajuste, la comunicación de verdad, la que sale del corazón y llega al alma, la que los ciudadanos reciben, entienden y empatizan. La del ejemplo. La del alcalde de Madrid, José Luis Martínez Almeida, acarreando cajas en el hospital de IFEMA, acudiendo a los homenajes a los sanitarios o insuflando cada día ánimo a todos, desde la humildad y la solidaridad

No hace falta tener a todos los medios de comunicación de tu lado. Eso puede ser importante para tratar de manipular, pero para comunicar, solo hace falta tener un buen mensaje y ser creíble. Y ambas cosas las tiene José Luis Martínez Almeida en esta crisis y no las está teniendo Pedro Sánchez

Porque en política hay que comunicar también con el corazón. Si quieres llegar al de la gente que te está escuchando, al de aquellos que hacen voluntariamente mascarillas o batas para los sanitarios llegando donde el Gobierno no llega, o llevan la compra a sus vecinos. Desgraciadamente de eso, de humanidad y de corazón, Pedro Sánchez e Iván Redondo van bien escasos.

Víctor V. Píriz Maya

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La personalidad de las personas | Alberto Astorga

La personalidad de las personas | Alberto Astorga

La personalidad de las personas | Alberto Astorga

La personalidad de las personas

 

(valga la redundancia)

 

ALBERTO ASTORGA

 

¿Por qué hacemos lo que hacemos? ¿Por qué están presentes ciertas actitudes en las personas que nos rodean y en nosotros mismos? ¿Por qué desempeñamos unas tareas mejor que otras?

Desde que el individuo tiene consciencia de sí mismo, de su identidad, estas preguntas han sido una constante que ha ocupado buena parte de sus pensamientos y ha generado todo tipo de teorías y creencias. Ya en la antigua Grecia, los filósofos reflexionaban sobre por qué las personas actúan de la manera en que lo hacen, por qué existen conductas distintas según de qué persona se tratara. La respuesta no era fácil, debido al infinito número de posibilidades y circunstancias, por lo que buscaron hacer clasificaciones que facilitaran su comprensión.

Los filósofos presocráticos, entre los que destaca Empédocles (cerca del 450 a. C.), utilizaron un grupo de elementos de la naturaleza, para explicar los patrones que en ella se encontraban. El pensamiento de que nada puede originarse de la nada y que lo que existe no puede desaparecer, cambió a partir de la consideración de que existían cuatro elementos que se hallaban en constante movimiento, mezclándose y repulsándose por las fuerzas del amor y el odio. Estos elementos, ya propuestos por otros filósofos, eran el agua, la tierra, el fuego y el aire. El agua es, a la vez, fría y húmeda; la tierra se considera seca y fría; el fuego, caliente y seco, y. el aire, húmedo y caliente.

En la misma época, el padre de la medicina, Hipócrates, asoció los cuatro humores distintos que encontró presentes en el cuerpo humano, con esos elementos y, ya desde ahí, el médico y filósofo romano Galeno, en el siglo II d. C, estudió cómo afectaban esos humores al temperamento de las personas. 

  • El agua, fría y húmeda, fue asociada a la flema o pituita generadas por el cerebro y el pulmón y, de ahí, al temperamento flemático, que suponía la racionalidad, la calma, la indiferencia, propia del invierno. 
  • La tierra, seca y fría, fue relacionada con la bilis negra que generaba el bazo, lo que reportaba al individuo un temperamento melancólico, idealista, abatido, somnoliento y depresivo, propio de la estación otoñal.
  • El fuego, caliente y seco, se identificó con la bilis amarilla del hígado y la vesícula biliar, que inducía un comportamiento colérico, temperamental y fácil de irritar, propio de los calores del verano. 
  • Finalmente, el aire, húmedo y caliente, se asoció a la sangre del corazón y facilitaba un comportamiento sanguíneo caracterizado por la valentía, la esperanza y el amor, propio de la primavera. 
Logo Disc Pequeño; personalidades DISC

En la antigua Grecia, los filósofos atribuían a ciertos elementos de la naturaleza efectos concretos sobre los personalidad"

Teoria de las personalidades DISC

La salud y el equilibrio personal del individuo era consecuencia, según Galeno, del necesario equilibrio que debía existir entre los cuatro fluidos corporales.

Estas teorías, constituyeron pieza esencial del comportamiento humano hasta la época del Renacimiento. A partir de ahí, no obstante, ha servido de inspiración a algunos psicólogos interesados por el estudio de las diferencias individuales y de la personalidad, entre ellos Hans Eysenck, Carl Gustav Jung y Myers-Briggs.

El primero, Hans Eysenck, desarrolló una teoría basada en tres dimensiones independientes de la personalidad: neuroticismo (N), extraversión (E) y psicoticismo (P), por lo que recibe el nombre de Modelo PEN.

Para Carl Gustav Jung, nuestro comportamiento se basa en la manera en que pensamos y procesamos. Sus teorías contribuyeron a la comprensión de los comportamientos «tipo», en la creencia de que los individuos tenían un «tipo psicológico» y que las personas varían según la forma en que perciben las cosas y toman decisiones. En 1921, Jung publicó el libro, “Tipos psicológicos”, identificando cuatro formas en que experimentamos el mundo: sensación, intuición, pensamiento y sentimiento.

El posterior desarrollo del ‘Myers-Briggs Type Indicator (MBTI)’, elaborado por Katherine Briggs y su hija, Isabel Briggs Myers con las teorías de Jung, permitieron establecer en 1962, cuatro dicotomías de la personalidad que generaban dieciséis tipos de personalidades distintas. Las dicotomías revelaban la forma de conducirse las personas en cuatro aspectos distintos.

Tipos de personalidad MBTI
Logo Disc Pequeño; personalidades DISC

El modelo de Myers-Briggs Type Indicador (MBTI), a través de cuatro dicotomías, permitió diferenciar hasta dieciséis tipos diferentes de personalidades. Estas dicotomías revelaban la forma de conducirse las personas en cuatro aspectos distintos"

La primera dicotomía reflejaba hacía dónde orienta el individuo su energía o su atención. Podía ser bien hacia el mundo exterior, la relación con los demás, la participación en acciones; o bien hacia el mundo interior, hacia la reflexión, la meditación, las ideas, el pensamiento. Aquella sería la actitud extrovertida (E), la otra la actitud introvertida (I).

La segunda trata de cómo el individuo capta la información, la percibe y recoge, para generar una respuesta. Las opciones son bien captar a través de los sentidos aquella información que está disponible, es tangible y concreta, o bien dejarse llevar por los pálpitos o intuiciones, más abstractas y sin origen determinado. Los primeros serían los sensitivos (S) y los segundos los intuitivos (N).

La tercera dicotomía revela la forma en que las personas toman las decisiones. Puede deberse a un proceso racional, más distante, y que considera aquello que es razonable, lógico, causal, consistente y ajustado a cierto conjunto de reglas establecidas. La otra forma sería tomarlas dando prioridad a las emociones, la empatía por la situación, la armonía y el consenso con las partes implicadas. Aquella sería una actitud de pensamiento (T) y la contraria sería la basada en el sentimiento (F).

La cuarta y última, valora la forma en cómo el individuo prefiere gestionar su mundo exterior, su entorno, su estilo de vida. Los hay juiciosos, sistemáticos, programados y metódicos, a quienes gusta llevar un control sin sobresaltos. Los hay, por el contrario, a quienes les atrae la espontáneidad, la informalidad y esquivar las reglas preestablecidas. Se trataría de los juiciosos (J) y de los perceptivos (P).

Si respondemos a cada una de esas dicotomías, nos encontramos con que la preferencia personal de cada uno de nosotros señala aquellas más dominantes, pemitiéndonos establecer dieciséis tipos de cuatro preferencias o dinámicas de tipos.

El desarrollo del Modelo de personalidad DISC

Por su intuitiva sencillez y, sobre todos, porque sustenta a la mayoría de los instrumentos de medición de la personalidad en el mundo empresarial, debe destacarse la teoría desarrollada a partir de 1928 por William Mountos Marston, psicólogo de la Universidad de Harvard. En su libro, «The Emotions of Normal People», Marston analizó los retos comunes y ordinarios de la gente normal en su día a día. Pretendía entender y describir el comportamiento humano, el por qué la gente, cada persona, hace lo que hace.

Identificó lo que denominó «las cuatro emociones principales» y asoció sus respuestas conductuales a distintos grados de intensidad. Hoy, sus investigaciones las conocemos como Modelo DISC, por los cuatro estilos de personalidad que distingue: Dominante (D), Influyente (I), Sensatos (S) y Correcto (C).

El Modelo DISC, por su aplicación, sencillez e identificación con las conductas reales, se ha comvertido en un sistema de medida de los rastos de la personalidad conductual, así como un poderoso predictor del comportamiento de las personas y extraordinariamente util en organizaciones, instituciones, empresas, familias y en todo tipo de circunstancias en que existan relaciones interpersonales y de equipo, como situaciones de ventas y compras, resolución de conflictos, procesos de negociación, comportamientos en familia, reuniones, organizaciónde equipos, contratación de personas, promoción a responsabilidades, etcétera.

Cuadro de personalidades DISC - Visioncoach

Todos somos una mezcla de los cuatro tipos básicos citados, siendo las puntuaciones más altas las que dan la información más relevante para determinar la conducta predecible de la persona. ¿Por qué hacemos lo que hacemos? ¿Por qué reaccionamos como reaccionamos? ¿Cómo puedo comunicarme mejor con los demás?

Cada estilo de personalidad cuenta con alto que se llama «miedo básico». Se trata de un miedo completamente inconsciente para la persona, pero que la conduce a tomar decisiones y a reaccionar de formas que otras personas, con otros estilos y otros miedos básicos, no entienden.

Cada personalidad se motiva de una forma distinta. Si no entendiéramos cómo se motiva cada uno de los estilos de personalidad, intentaríamos motivarlos como nos motivamos nosotros mismos y esto puede resultar en ocasiones, contraproducente.

Fue durante la década de 1940 cuando la técnica de Marston adquirió importancia, al ser adoptada por el ejército de Estados Unidos como ayuda en el reclutamiento durante la Segunda Guerra Mundial. Durante las décadas siguientes, su simplicidad y flexibilidad facilitó que se utilizaran cada vez más en todo el mundo, ampliándose sus áreas de interés y de utilidad y aplicándose a las empresas y a las organizacion.

Personalidad C; Cristiano Ronaldo; Test de personalidad

Características generales del Estilo D

Directo, dominante, determinado.

Es el estilo con el que actúa, normalmente, el 3% de la población. Es líder natural, tiene fuerza de voluntad, es persistente y tiene metas claras y orientado a ellas. No tienr mucha paciencia, puede herir a las personas y piensa que sus maneras son mejores que las de los demás. Un ejemplo podría ser Cristiano Ronaldo.

El D controla la situación y temerá cualquier idea de fracasar y perder el control. Teme que le fallen las personas que considera de confianza o que otros se aprovechen de él. 

Características generales del Estilo I

Influyente, inspirado, impulsivo.

Es el estilo con el que actúa, normalmente, el 11% de la población. Es el vendedor natural, buen animador, flexible y divertido. Se aburre fácilmente, se olvida de las cosas y de las personas y es superficial. 

Dado que la aceptación y aprobación por los demás es el principal deseo de I, el rechazo es su mayor temor, por lo que intentará llevarse bien con todo el mundo. Sergio Fernández, «El Monaguillo, podría ser un excelente candidato para este tipo de personalidad. 

El Monaguillo; tipo de personalidades DISC _ Visioncoach

Características generales del Estilo S

Sensato, seguro, estable.

Es el estilo con el que actúa, normalmente, el 69% de población. Su lado positivo es el ser un cuidador natural, pacificador, tener mucha empatía y ser muy familiar. Su parte negativa es la pasividad, no querer confrontar ni enfrentarse a nada ni a nadi3 y no suele decir «no», sino que utiliza un «vale«, para salir del paso y luego hacer lo que quiera. El Dr. Cavadas, parece ser un buen candidato para este tipo de personalidad. El Dr. Cavadas, podría ser un ejemplo de personalidad S.

Debido a que S busca la estabilidad y un sentir de paz y seguridad, teme la pérdida de seguridad a través de situaciones de cambio. No es capaz de priorizar y puede ser rencoroso.

Doctor Cavadas; Tipo de personalidad S; DISC
Ana Patricia Botin, tipos de personalidad - Visioncoach

Características generales del Estilo S

Correcto, controlador, cumplidor.

Completamente opuesto al I. Es el estilo con el que actúa, normalmente, el 17% de la población. Su aspecto positivo es ser un estudiante natural, detallista, ordenado y exacto. Su parte negativa es el temor al fracaso, ser lento y no ser flexible. Ana Patricia Botín, da seguridad y confianza en sus valoraciones.

El test DISC

Inicialmente, los perfiles de DISC se creaban a partir de cuestionarios impresos, marcados y evaluados a mano. Con la llegada de la informática y de Internet, DISC se adapta fácilmente a un enfoque más automatizado, por lo que ahora las pruebas de personalidad pueden ser administradas de forma completamente automática. No solo se pueden administrar las pruebas en la web, sino que los sistemasa espertos pueden compilar informes personalizados a partir de los resultados, sin necesidad de intervención humana. Todo esto hace que DISC sea una solución ideal de creación de perfiles para el siglo XXI.

DISC es un instrumento aceptado universalmente y altamente válido para medir tendencias de comportamiento. El Modelo DISC provee un lenguaje común para hablar sobre el comportamiento humano y abre una puerta para una comunicación más ectiva. A través del test DISC, puedes descubrir qué tipo de conducta tienes y obtener de forma gráfica cuáles son tus dos valores más altos que conforman tu lenguaje de comunicación y tu personalidad. Las evaluaciones DISC te ayudarán a conocer cuál es tu estilo de comportamiento.

En Visioncoach estamos CERTIFICADOS EN CONDUCTA HUMANA, DISC y acreditados por The Insitute of Motivational Living. Por ello, realizamos habitualmente consultoría organizacionas con muy diversos casos en los que el Método  DISC se ha convertido en una herramienta muy interesante y muy útil. Para procesos de selección de personal, para puestos con determinadas especificaciones, ascensos y promociones de mandos a mayores responsabilidades, encajar equipo que no funcionan, dar competencias a quien puede realizarlas mejor, relaciones de pareja, relaciones familiares, negocioaciones, gestión de conflictos y liderazgo. 

Conocer la metodología y su utilidad en las organizaciones, sirve para crear mejores ambientes, conocer cómo hablar con las personas, aprovechar sus fortalezas y crear un mayor bienestar personal en los entorno en que nos movemos.

Alberto Astorga

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