Pensamiento único | Damián Beneyto

Pensamiento único | Damián Beneyto

Pensamiento único | Damián Beneyto

Pensamiento único

DAMIÁN BENEYTO

Parece que fue el periodista gallego Ignacio Ramonet allá por 1994 el primero en utilizar el concepto de ‘pensamiento único’ en su libro “Pensamiento crítico vs. Pensamiento único”Ramonet lo define como “una especie de doctrina viscosa que, insensiblemente, envuelve cualquier razonamiento rebelde, lo inhibe, lo perturba, lo paraliza y acaba por ahogarlo”.

Lo que está claro es que el ‘pensamiento único’ es el pensamiento de los que lo saben todo, de los que se creen que están por encima del bien y del mal, de los que afirman estar en posesión de la verdad absoluta y, por consiguiente, se sienten intelectual y moralmente por encima de los demás.

Curiosamente este concepto fue utilizado por la izquierda anticapitalista para poner en evidencia el neoliberalismo económico como único pensamiento aceptable.

El 'pensamiento único' el el pensamiento de los que lo saben todo, de los que creen que están por encima del bien y del mal, de los que afirman estar en posesión de la verdad absoluta"

Desde un punto de vista filosófico fue Arthur Schopenhauer, primero, y Herbert Marcuse, después, los que inicialmente utilizaron este concepto, pero con un significado distinto al que se le da actualmente.

No cabe duda que la globalización ha contribuido a la expansión de la uniformidad de pensamiento y en pocos años, especialmente en los países más desarrollados, se ha convertido en una especie de religión en la que uno ingresa sin enterarse y que cada día tiene más adeptos y es más fundamentalista.

Damián Beneyto; Regionalismo extremeños; Asamblea de Extremadura; Visioncoach;

Damián Beneyto Pita es natural de Carcaixent (Valencia), pero extremeño y residente en Plasencia desde 1977.  Profesor de Enseñanza Secundaria. Fue Director del Centro de Artes Escénicas y de la Música, CEMART, entre 2007 y 2011. Director también de la Escuela Superior de Arte Dramático de Extremadura entre 2007 y 2010, Diputado en la Asamblea de Extremadura por el Partido Regionalista Extremeño, PREX, entre 2011 y 2015.

Naturalmente esta ‘religión’ tiene sus ‘popes’, sus propagadores, evangelizadores o proselitistas que desde los poderes fácticos políticos y económicos dicen al pueblo soberano lo que debe pensar y, como consecuencia de esa unidad pensante, qué debe comprar, a quién debe votar, qué debe opinar, cómo debe vestir e incluso cómo deben responder ante los problemas que suscita el mero hecho de existir.

Los medios de comunicación son los grandes propagadores. Son los encargados de decirnos lo que está bien y lo que está mal, según los patrones perfectamente diseñados por los ‘queridos líderes’ que gobiernan el otrora planeta azul. La humanidad poco a poco se va imbuyendo de ese ‘dogmatismo ético’ que no admite ningún tipo de discusión.

El pensamiento único ha creado unos principios éticos con los que se valora tanto el presente como el pasado, sin tener en cuenta la evolución histórica y cultural del ser humano. Todo es evaluado desde esta nueva normativa moral.    

Para la implantación de este ‘nuevo orden’ es necesario limitar el espíritu crítico del personal y para ello ha de ser lo más dependiente posible de los poderes establecidos.

Hay que hacer creer al pueblo soberano que la supervivencia y el bienestar son imposibles sin el concurso del poder político, pero además, para fijar esta creencia, los probos ciudadanos deben sentirse protagonistas de la elección de sus gobernantes, aunque al final sólo hayan metido en la urna, en el mejor de los casos, una papeleta donde figuran un determinado número de personajes que no conoce en su mayoría y para cuya inclusión en la misma no se le ha pedido ni siquiera opinión.

La intervención en los sistemas educativos es fundamental para conseguir que las nuevas generaciones sean cada vez más dúctiles y maleables. Adoctrinar a niños y jóvenes es la mejor forma de conseguir para el futuro una sociedad adocenada, ignara y carente de la capacidad de rebelarse ante el nihilismo moral o ético imperante, donde nada es moralmente apropiado o inapropiado salvo lo que se ha dado en  llamar lo ‘políticamente correcto’.

Discrepancia

Hoy para cambiar la sociedad no es necesario tomar el Palacio de Invierno; basta con tomar las escuelas".

François Mitterrand

 Hoy en día, si no quieres complicarte la vida, si quieres ser aceptado socialmente, si no quieres ser tachado de retrogrado, reaccionario o faccioso tienes que comulgar con unos principios que emanan de ese ‘pensamiento único’ y que te va a dar el sello de ‘corrección política’ tan valorado hoy en día.

No quiero decir que esos principios no sean en algunos casos loables, si se toman en su justa medida, ni que puedan suponer un avance para que cada vez la sociedad sea más tolerante y justa; pero mucho me temo que en demasiadas ocasiones se consiga el efecto contrario y lo que es peor, puedan suponer un atentado a las libertades individuales del ser humano.

Así, por ejemplo, el feminismo –‘hembrismo’ en mi humilde opinión, por una cuestión semántica- entendido como la igualdad jurídica, laboral  y social entre  hombres y mujeres

se ha acabado convirtiendo, con el beneplácito de gran parte de la sociedad, en lo que algunos llamamos ‘feminazismo’. Es decir, en una corriente ideológica que hace al macho culpable de todos los males de la humanidad. A tal punto se ha llegado que no se ha tenido ningún pudor jurídico en negarle al varón la presunción de inocencia ante cualquier denuncia que provenga de una ‘dama’ sin ni siquiera comprobar la veracidad de la misma.

Es cierto que la violencia machista provoca decenas de crímenes al año en nuestro país y que sigue habiendo violaciones y abusos, lo cual es absolutamente condenable, pero no es menos cierto que no puede haber discriminación por razón de sexo, como dice nuestra Constitución, y en nuestro país esa discriminación existe en contra de los hombres. Cualquier ciudadano macho está expuesto a que su vida se convierta en un infierno si es denunciado por alguna hembra resentida, aunque sea más inocente que los pensamientos de Bambi.

No se trata de discriminar, se trata de igualar y para eso, tanto ellas como ellos deben demostrar sus aptitudes y sus méritos. La discriminación positiva es, al fin y al cabo, discriminación sin apellidos. Pero nadie o muy pocos ponen en tela de juicio ese abuso manifiesto del sexo femenino sobre el masculino.

Lo del lenguaje ya es de traca. Usar de forma genérica el masculino se ha convertido en un atentado contra la igualdad y ya no conformes con utilizar redundantemente ambos géneros, aunque muchas veces nos los inventemos -lo cual es de un cursi empalagoso además de una gilupolluá-,  sino que, además, algunos zaparrastrosos de la cultura se han inventado un tercer género que debe ser un cruce entre feminazi y alienígena.

Lo grave de este desmadre idiomático es el mensaje que se lanza a una juventud que, dada su ignorancia, acabará no sabiendo hablar, agravándose en que ya escribir casi no sabe.

La superioridad moral de la izquierda profunda es en nuestro país otro dogma del ‘pensamiento único’. Para ello, no han tenido ningún problema en tergiversar acontecimientos acaecidos en nuestra historia, especialmente en lo referente a la Segunda República y posterior Guerra Civil, ocultando y falseando hechos y documentos, y llevando a cabo un revisionismo grosero y obsceno con el fin de blanquear a unos partidos de izquierda cuyos dirigentes nos llevaron a uno de los peores momentos de nuestra historia.

El culmen de esta tropelía es la creación de una Ley de Memoria Histórica, convertida ahora en Ley de Memoria Democrática, que no es más que una forma de legitimar una visión absolutamente partidista y maniquea de lo que ocurrió en España entre 1931 y 1975. Naturalmente, este juicio sectario de la historia se convertirá, Dios mediante, en materia obligatoria en nuestro sistema educativo como parte del adoctrinamiento programado.

Las etiquetas del pensamiento único

Lo que más sorprende de este lavado de cerebro al que vamos a someter a nuestros niños y jóvenes es el lamentable espectáculo que está dando la derecha patria, que sigue absolutamente acomplejada y que no es capaz de plantar cara a tamaño desafuero. La Ley de Memoria Histórica, además de partir de premisas falsas y maniqueas, es un atentado contra las libertades individuales de los españoles.

Manifestarse de derechas o de izquierdas en este país también nos hace más o menos ‘políticamente correctos’. Ser ‘de derechas’ no está bien visto y de ahí, fruto de una especie de sentimiento culpatorio instigado especialmente por los medios, nos hemos inventado eso del centro-derecha, que nos tranquiliza mucho la conciencia. Ser de derechas es en nuestro país ser un facha -forma coloquial de denominar a los fascistas-, aunque, por mucho que se empeñen los sesudos propagandistas rojelios, en España nunca hubo fascismo (para saber lo que es el fascismo les recomiendo la lectura de “El Hijo del Siglo” de Antonio Scurati). Sin embargo, sí ha habido y hay comunismo; una ideología que, donde ha conseguido gobernar, ha masacrado a la población y teniendo a sus espaldas más de 100 millones de muertos y la ruina social y económica de muchos países.

Pues, ya ven, fruto de ese ‘evangelio progre’, uno no puede negar el holocausto nazi, bajo pena incluso de cárcel, pero si puede negar el genocidio de Stalin en Ucrania o el gulag siberiano, donde murieron millones de personas, unas ajusticiadas y otras de frio y hambre. Incluso se permite poner en lugares públicos fotos en homenaje al mayor asesino de la historia –el ‘camarada Stalin’-, ayuntamientos incluidos.

El ecologismo y el cambio climático también forman parte del ‘pensamiento único’. Aun siendo cierto que estamos en un periodo de cambio climático y que el aumento de la población de la tierra hace que se necesiten más recursos, no parece muy científico hacer al ser humano único responsable del llamado ‘calentamiento global’. Desde el Jurásico se han producido en nuestro planeta más de mil cambios climáticos con glaciaciones que han congelado medio planeta y periodos interglaciares muy cálidos. Esto se debe, según los expertos del Instituto de Tecnología de Massachusetts, a los cambios en la órbita de la Tierra alrededor del Sol. También sus estudios demuestran que los periodos cálidos son más prolongados que los glaciares.

La contaminación ambiental es un hecho innegable, como también lo es la utilización política y económica que de la misma hacen los poderes fácticos que manejan el cotarro en el mundoLos partidos de izquierda han encontrado un filón ideológico en eso del ecologismo y, a pesar de que los países más rojelios son los que más contaminan, sin ningún pudor se han lanzado a acusar al capitalismo y al liberalismo de todos los desastres habidos y por haber. Como ejemplo les diré –según datos que me ha facilitado el profesor Julián Mora Aliseda– que China, país ‘de derechas’ donde los haya, emite el 30% del total del CO2 humano al planeta y, además, se dedica a esquilmar los recursos naturales de los países africanos y sudamericanos. Sin embargo, Europa, cuna del capitalismo, ha reducido un 25% las emisiones de CO2 desde 1990 y ha aumentado su superficie forestal en un 30%.

Damián Beneyto y el pensamiento único

El 'feminismo' se ha convertido en una corriente ideológica que hace al macho culpable de todos los males de la humanidad, negándole sin pudor la presunción de inocencia ante cualquier denuncia que provenga de una 'dama' ".

Pero, a pesar de lo evidente, lo ‘políticamente correcto’ es ser de izquierdas si te preocupa el medio ambiente. Uno no puede ser ecologista de derechas, ¡faltaría más! Claro que hay ecologismos fundamentalistas que rayan en la paranoia y que, como ocurre en Extremadura, pueden acabar poniendo a la especie humana en peligro de extinción.    

En los temas migratorios también hay que estar con la doctrina oficial y decir, con la boca chica, que ‘ancha es Castilla’ y que todos ‘p´alante’.  Este espíritu tan caritativo acabará convirtiéndose en un gran problema, si ya no lo es. Curiosamente, son los países capitalistas los más solicitados –nadie emigra a Rusia, China, Venezuela, Cuba, Corea del Norte, Irán, etc.– por la pobre gente que huye despavorida de su tierra, bien por el hambre, bien por la guerra o por ambas cosas. No deja de ser una paradoja trágica que sean nuevamente los partidos de izquierda quienes pretendan convertirse en los paladines de los emigrantes, cuando muchos de ellos huyen despavoridos de países con regímenes comunistas.

Convertir a Europa y a Norteamérica en únicos destinos de decenas de millones de personas no solo no soluciona el problema si no que lo va agravando y se convierte en una bomba de relojería que puede explotar en cualquier momento. Decir este axioma le puede costar a uno ser catalogado de xenófobo, racista y otras lindezas; pero si no se tratan los problemas de los países productores de emigrantes en origen, en pocos años la cultura occidental y el estado del bienestar habrán desaparecido de la faz de la tierra.

Tener espíritu crítico, disentir de la ‘propaganda oficial’, defender la libertad individual y educar en la autonomía, la independencia, el atrevimiento y el descubrimiento, no entra en ese ‘pensamiento único’ de lo ‘políticamente correcto’. Se impone la dictadura de las ideas y solo valen aquellas que hacen al ser humano más dependiente, más obediente, menos autónomo y, naturalmente, menos libre.

Damián Beneyto

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La política de la Educación

CARMEN HERAS

La experiencia como docente durante cuarenta y tantos años me ha enseñado que se puede desmotivar el aprendizaje cuando, a esfuerzos distintos y progresos distintos, se les iguala por abajo.

El sistema educativo, en su base, constituye un marco mínimo de referencia que prepara a los seres humanos para andar por la vida con unos recursos garantizados de supervivencia. Pero, sobre dicha base, se necesita construir un edificio.

Por ello, las administraciones no deberían ser tan débiles como para nivelar a todos los alumnos poniendo la cota en los mínimos, pues entonces las posibilidades de una región o de un país, en compentencia con otros -si hay mercado hay competitividad-, disminuyen a marchas forzadas, lo que acarreará nuevas y sempiternas desigualdades.

Esto no lo arregla ningún político citando lo que le cuentan los sindicatos del sector, sino la reflexión seria y sosegada del grupo formado por los que, día a día, están trabajando en él"

Ya está ocurriendo. La pandemia lo ha hecho aún más evidente. Y esto no lo arregla ningún político citando lo que le cuentan los sindicatos del sector, sino la reflexión seria y sosegada del grupo formado por los que, día a día, están trabajando en él.

Este análisis conjunto está faltando en este momento. Y sobrando muchas disquisiciones políticas, a derecha e izquierda, que -a mi juicio- no van al análisis general del problema.

Carmen Heras Pablo
Carmen Heras Pablo es Licenciada en Ciencias Físicas por la Universidad de Valladolid. Profesora Titular de Didáctica de las Matemáticas en la Universidad de Extremadura donde anteriormente dirigió la Escuela Universitaria de Formación del Profesorado.
Diputada en el Congreso por Cáceres en representación del PSOE en 1996-2000, fue concejala en el Ayuntamiento de Cáceres en 2003-2007 y Alcaldesa entre 2007 y 2011

El historiador Noah Harari explica, con bastante realismo, que cualquier poder es como un gran agujero negro del que resulta difícil salir, pues tiende a enrocarse ocupando el centro -conservador- de lo establecido.

Muchos son los que colaboran en ello: los que lo necesitan, los aduladores y los que no se atreven a oponerse. Al fondo, fluctúa la escasa formación en los ‘intríngulis’ políticos de una inmensa mayoría de individuos, lo que los convierte en masa altamente manipulable.

Es difícil que quien tiene preocupaciones económicas o vive situaciones extenuantes de trabajo, tenga tiempo, además, para dedicar sus fuerzas a cuestiones de interés colectivo con un altruismo pleno. Los tiempos no son propicios a utopías e, incluso los sujetos más involucrados dentro de las organizaciones existentes, poseen grandes dosis de pragmatismo inyectadas en vena, aun cuando aparenten una vocación de servicio desinteresada.

La política de la educación, por Carmen Heras

La educación de un país es un asunto fuertemente político, a fuer de personal y familiar, que no debiéramos empequeñecer"

La educación es un concepto utilizado para explicar conductas o actitudes; en unas ocasiones bastante injustificables (decimos entonces que hay ‘mala educacion’) o en otras, excelentes y dignas de una ‘buena educación’ (argumentamos).

Es la educación de un país un asunto fuertemente político (a fuer de personal y familiar) que no debiéramos empequeñecer bajo el argumento de que hoy todo el mundo tiene acceso a unos niveles básicos de ella bastante aceptables y de que la existencia de universidades en todas la autonomías garantiza a la mayoría de los jóvenes unos estudios superiores.

Una falsa idea de democratización en las aulas ha traído consigo una bajada en los controles de calidad, auspiciada por la ausencia de filtros de actitudes previas de cualquier estudiante"

La realidad es otra. Una falsa idea de democratización en las aulas ha traído consigo una bajada en los controles de calidad, auspiciada también por la ausencia de un verdadero filtro específico que garantice en alguna medida las aptitudes previas de cualquier estudiante de grado y profesional futuro.

Para agravarlo, se ha producido una subdivisión exagerada en las categorías del profesorado universitario a las que se accede, no tanto por su excelencia como docente como por sus cualidades y publicaciones investigadoras en campos no necesariamente dedicados a la enseñanza.

De todo esto, en los foros oficiales, no se habla.

Carmen Heras

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Hijos de Celaá

DAMIÁN BENEYTO

A la generación de los ‘hijos de la LOGSE’ le va a seguir la de los ‘hijos de la tal Celaá’ que van a dar testimonio, corregido y aumentado, de una formación humana e intelectual sin parangón en nuestras historia.

Con esta nueva ley educativa, se va a rizar el rizo de la ineptitud política, del sectarismo y del todo vale con tal de estar en la poltrona. Poner en la palestra legislativa una Ley Orgánica de Educación en unos momentos como los que vivimos, solo demuestra que se pretende ocultar a la sociedad, más preocupada por asuntos sanitarios y económicos, una ley que alienta la des-educación, la des-instrucción y favorecer el adoctrinamiento de niños y jóvenes.

Se pretende ocultar a la sociedad -más preocupada por asuntos sanitarios y económicos- una ley que alienta la des-educación, la des-instrucción y favorecer el adoctrinamiento de niños y jóvenes"

El estado de alarma en vigor va a facilitar, con premeditación y alevosía, que este proyecto de ley no pase por algunos filtros legislativos y consiga su aprobación retorciendo las normas a las que debe someterse cualquier Ley Orgánica en un estado de derecho. Vamos, una cacicada antidemocrática en toda regla.

Desde la desgraciadamente famosa LOGSE, las leyes educativas han proliferado como níscalos en pinares o lepiotas en dehesas e, incluso, se han solapado en el tiempo con el consiguiente desmadre organizativo en los centros de enseñanza.

El motivo de esta diarrea legislativa no ha sido otro que ese afán de los gobiernos de turno, especialmente los de izquierda, por fijar ideológicamente al pueblo soberano. Vamos, lo que se llama adoctrinar.

Damián Beneyto; Regionalismo extremeños; Asamblea de Extremadura; Visioncoach;

Damián Beneyto Pita es natural de Carcaixent (Valencia), pero extremeño y residente en Plasencia desde 1977.  Profesor de Enseñanza Secundaria. Fue Director del Centro de Artes Escénicas y de la Música, CEMART, entre 2007 y 2011. Director también de la Escuela Superior de Arte Dramático de Extremadura entre 2007 y 2010, Diputado en la Asamblea de Extremadura por el Partido Regionalista Extremeño, PREX, entre 2011 y 2015.

Lo de menos era y es que nuestros niños y jóvenes adquieran conocimientos que les permitan formarse y prepararse para el futuro. Es más, es mejor que no los tengan, así serán más dúctiles y maleables. Sin conocimientos no hay espíritu crítico posible, ni capacidad para discernir, ni siquiera para entender la realidad social que les está tocando vivir.

Hay que reconocer que el afán del centro-derecha por adoctrinar es mucho menos virulento que el de la izquierda y las leyes educativas que han promulgado cuando han gobernado han sido, fruto de su complejo de inferioridad ética, parches que solo han traído más ruido que nueces.

La nueva Ley Orgánica de Educación, con la que nos va a obsequiar el Frente Popular gobernante, tiene dos características que conviene airear para conocimiento del personal.

La primera es que, con claras intenciones aviesas, se incentivará la burricie, la ignorancia, la incultura y el analfabetismo funcional. Los alumnos promocionarán de curso e incluso titularán, bachillerato incluido, sin ningún límite de asignaturas suspensas. Se acabó eso de repetir curso que, por lo visto, crea grandes traumas a los alumnos. Se van a valorar actitudes, no conocimientos. La única asignatura que hay que aprobar es la de ‘Formación de Espíritu Nacional’, en versión del frente popular.

Ministra de Educación Isabel Celaá

Con claras intenciones aviesas, se incentiva la 'burricie', la ignorancia, la incultura y el analfabetismo funcional"

La segunda característica de esta ley que se nos viene encima es acabar con las señas de identidad de España como nación, para contentar y dar alas al secesionismo, como pago electoral, y al comunismo que, como siempre ha demostrado, odia a este país y pretende aniquilarlo convirtiéndolo en una república de repúblicas bananeras.

Para ello, se adereza nuestra historia, manipulándola e introduciendo en lo que se va a llamar ‘Memoria Democrática’, toda suerte de trolas, embustes y medias verdades, pero, además, y esto sí es una gran infamia, relegando nuestro idioma, el español, que nos une y que es hablado en el mundo por casi 600 millones de personas, a una mera lengua no vehicular en muchas comunidades de España con el consiguiente empobrecimiento cultural que ello supone.

El PSOE, el partido político que más daño ha hecho a este país a lo largo de su historia, está dispuesto nuevamente, aprovechando la situación sanitaria y económica, a hacer de nuestros niños y jóvenes, unos parias del pensamiento único abocados a depender toda la vida, del ‘papá Estado’

Pero no pasa nada. Total, la educación no le importa a casi nadie. ¡Pobre España!

Damián Beneyto

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Rupturas, más o menos, traumáticas | Carmen Heras

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Rupturas, más o menos, traumáticas

CARMEN HERAS

Moramos en un tiempo en el que todo el mundo entiende de todo. Intentas iniciar un plan para configurar un grupo con unos objetivos determinados y los más ambiciosos lo primero que ‘se piden’ es un puesto de ‘Coordinador’, o de ‘Secretario’, o incluso de ‘Jefe Máximo’, arguyendo razones de ‘menor edad’ para ocupar tu sitio. El mundo al revés. En él se supone que la ‘gente madura’ no puede seguir un proceso de gestación de un proyecto, aunque la idea haya partido de ella.

Casi por los mismos años en los que la sociedad del bienestar reclamaba al Estado puestos de profesionales del ocio -porque éste forma parte de la vida-, se puso en marcha el ‘discurso de la renovación’ en los partidos. El mismo dictamina, sin lugar a apelación, que «cualquiera, con una experiencia contrastada, debe renunciar dejando su espacio a un inexperto ‘sin mochila’ al ser éste último mucho más dúctil y permeable y, por tanto, bastante más producivo en el espacio político, tan necesitado de ‘imágenes inocentes'».

Muchos dieron en tipificar la prudencia de juicio de la persona experimentada como algo negativo y elevaron la insolencia del bisoño a algo 'políticamente extraordinario'

Y sucedió que, al aplicarse de manera genérica, muchos dieron en tipificar la prudencia de juicio de la persona experimentada como algo negativo y elevaron la insolencia del bisoño a algo ‘políticamente extraordinario’. Fue una manera chapucera de abrir hueco a las generaciones más jóvenes que venían reclamando un sitio con insistencia. Y lo curioso es que los votantes ‘picaron’. Pero fue un desperdicio en tiempos de opulencia y exceso, cuando el ocio se permitió llenar el espacio del trabajo. Cuando la crisis actual ni se preveía.

Carmen Heras Pablo
Carmen Heras Pablo es Licenciada en Ciencias Físicas por la Universidad de Valladolid. Profesora Titular de Didáctica de las Matemáticas en la Universidad de Extremadura donde anteriormente dirigió la Escuela Universitaria de Formación del Profesorado.
Diputada en el Congreso por Cáceres en representación del PSOE en 1996-2000, fue concejala en el Ayuntamiento de Cáceres en 2003-2007 y Alcaldesa entre 2007 y 2011

No fue la siguiente generación la que tomó el relevo, al estar ‘contaminada’ por haber colaborado con sus antecesores, sino la siguiente a la siguiente; así que llegaron por todos los caminos personas sin cordon umbilical con las que ligase directamente con quienes fueron ‘decapitados’. Y, en el medio, se perdió para la cosa pública toda una generación que era el puente natural entre los que se fueron y los que habían de llegar, en un proceso inteligente de renovación lógica.

No hubo conductores a través de los cuales viajase la corriente eléctrica que significa un ideario aplicado al terreno, unos lazos de compañerismo, un mismo lenguaje político. Gente recien llegada fue ascendida, sin formación política suficiente, comenzando su vida, sin preparación y que, en una eslacada meteórica, ocupan puestos de relevancia, no por especificidad, sino por ser jóvenes y estar en el sitio justo en el momento preciso.

Politicos jóvenes e insensatos; Carmen Heras;

No hubo contención en el gesto de aceptar altas responsabilidades. Todos lo hicieron. Los pocos ‘mayores’ que quedaron, para que no les fuera reclamado incluso su propio estatus, se rodearon, emboscados, de muchos jóvenes en edad de aprender, todos ellos encaramados en puestos altos de la pirámide de mando. Y, así, los clanes de allegados se aprestaron a ofrecer una imagen juvenil y moderna muy al gusto de la época, donde las modelos empiezan a llevar ropa adulta con catorce o quince años.

Y ocurrió que el espacio político de representación de España fue llenándose de ‘muchachos y muchachas’ a los que denominaron ‘líderes’, sin serlo. Y todo se cubrió de directores de sucursal. A veces, ni eso.

Carmen Heras

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Hijos de la LOGSE

DAMIÁN BENEYTO

Ante el atentado sufrido por las estatuas de los conquistadores extremeños en la ciudad de Badajoz el pasado Día de la Hispanidad, comentaba en Facebook que el origen de esas gamberradas estaba en la Ley Orgánica de Ordenación General del Sistema Educativo de España, más conocida por LOGSE, y en las demás leyes educativas emanadas de esta. Naturalmente, algunos usuarios mostraron su extrañeza ante esta afirmación e incluso alguno protestó airadamente por mi aseveración de la que me reafirmo y aclaro.

La necedad es directamente proporcional a la incultura y necios son los que actúan guiados por lo que les cuentan otros tan incultos como ellos pero de mayor prosapia. Los intereses políticos de unos y la desidia de otros han conseguido que las generaciones actuales sean las peor formadas e informadas desde finales del siglo XIX, cuando la Institución Libre de Enseñanza fundada por el catedrático D. Francisco Giner de los Ríos ponía al servicio de los españoles un sistema educativo independiente de ideologías políticas y laico, que no laicista.

Juzgar la historia partiendo de los principios éticos actuales es una sandez y sólo demuestra o incultura supina u odio irracional hacia tu tierra y tus antepasados"

No conocer nuestra historia es ya un déficil importante, pero conocerla falseada, desvirtuada, adulterada o tergiversada por los intereses espurios de cuatro ‘vendepatrias’ de tres al cuarto debería estar prohibido. Nuestra historia como nación no comenzó anteayer, como pretenden hacer creer interesadamente los hijos bastardos de esta noble tierra.

Desde la Hispania romana, y aún antes, han pasado muchas cosas en estos lares. Hemos sido visitados por muchas culturas que nos han dejado su huella más o menos profunda y que han producido un mestizaje del que hoy nadie puede escapar, por mucho que quiera reinventar lo acontecido o buscar RHs que les distingan.

Damián Beneyto; Regionalismo extremeños; Asamblea de Extremadura; Visioncoach;

Damián Beneyto Pita es natural de Carcaixent (Valencia), pero extremeño y residente en Plasencia desde 1977.  Profesor de Enseñanza Secundaria. Fue Director del Centro de Artes Escénicas y de la Música, CEMART, entre 2007 y 2011. Director también de la Escuela Superior de Arte Dramático de Extremadura entre 2007 y 2010, Diputado en la Asamblea de Extremadura por el Partido Regionalista Extremeño, PREX, entre 2011 y 2015.

Somos la nación más antigua de Europa pese a quien pese y durante siglos fuimos el país más poderoso del mundo con un imperio donde ‘no se ponía el sol’. Naturalmente que hemos hecho cosas mal, como cualquier otro país del mundo, pero también muchas bien y de esas cosas que hemos hecho bien, destaca el Descubrimiento de América.

Ningún país aportó a los pueblos conquistados lo que aportó España: escuelas, hospitales, universidades, obras públicas, etc., y no hubo nadie menos racista que los españoles. De ahí el MESTIZAJE que contribuyó a una justicia social inimaginable en aquellos tiempos en las cololias inglesas, holandesas o portuguesas. Claro que hubo abusos y gentuza que asesinó y robó, pero ningún gobierno del mundo en aquellos tiempos legisló a favor de los indígenas como lo hizo la corona española.

Si de algo deben estar orgullosos los extremeños son de los hombres y mujeres nacidos en esta tierra que pusieron su grano de arena en la gran gesta del descubrimiento y posterior conqusita de América. Sí, conquista, porque era el siglo XV y entonces, anterior y posteriormente, unos pueblos conquistaban a otros. España fue conquistada por cartagineses, romanos, suevos, vándalos, alanos, godos, visigodos, árabes, franceses -estos ya en el siglo XIX-, entre otros pueblos, y no he visto ultrajar las estatuas de Anibal, César, Pompeyo, Requila (rey suevo), Teodorico, Muza, Almanzor, Napoleón, etc., en sus países de origen por haber conquistado España.

Vandalismo en el Dia de la Hispanidad en Badajoz

Juzgar la historia partiendo de los principios éticos actuales es una sandez y solo demuestra o incultura supina u odio irracional hacia tu tierra y tus antepasados.

Las pobres criaturas que se dedicaron a ensuciar las estatuas de sus ilustres antepasados en Badajoz el pasado Día de la Hispanidad son hijos de la LOGSE y de una izquierda amargada y sectaria y a la que le da vergüenza decir ¡VIVA  ESPAÑA!

 

Damián Beneyto

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