El Salvador: ARENA, principios y valores en tiempos de cambio | Gabriela Alas
El Salvador: ARENA
Principios y valores en tiempos de cambio
GABRIELA ALAS
Cuando decidimos entrar al mundo de la política nos preguntamos ¿por qué? ¿para qué? y ¿cómo? También me lo pregunté. Decidí entrar a la política sin tener un verdadero conocimiento a lo que me enfrentaría. Recuerdo haber recibido invitación de partidos políticos por mi alta crítica en redes sociales a las coyunturas nacionales, pero no era solo de aceptar entrar a un partido político sin tener una razón de ser. Necesitaba sentirme identificada con sus ideales y no ir en contra de mis principios y valores que me enseñaron en casa.
Estaba convencida que había surgido un compromiso propio de dejar mi comodidad del otro lado de la pantalla, de dejar mis críticas en redes sociales e involucrarme y contribuir para cambiar esa realidad política nacional; poder ser un agente de cambio real y poder incidir de manera positiva a la sociedad a través de la política, pero de acuerdo a mis ideales.
Necesitaba como primer paso, identificarme con mis ideales en un partido político. Esos ideales que nos enseñan en casa: que la familia es el núcleo de la sociedad; que el logro de una meta es producto del esfuerzo individual; la libertad, la justicia, el respeto hacia la dignidad humana y el derecho a la vida.
Dejar mis críticas en redes sociales, involucrarme y contribuir para cambiar esa realidad política; poder ser un agente de cambio e incidir de manera positiva en la sociedad "
Sin duda alguna, son principios básicos con los que cualquier salvadoreño -siendo un país conservador- podrá identificarse y son los mismos principios que identifican a Alianza Republicana Nacionalista (ARENA).
Son los mismos principios que me identifican, por lo que decidí entrar a la Juventud Republicana Nacionalista (JRN), uno de los sectores más importantes de ARENA. Me encontré con muchos jóvenes voluntarios que tenían ganas de trabajar por un mejor mañana de manera desinteresada.
Todos con distintas historias, distintas edades, distintas personalidades; jóvenes que trabajan y estudian, otros solo trabajan o solo estudian por falta de oportunidades, pero todos con algo en común: cambiar la realidad nacional y hacer mejor política pero con principios. Dios, Patria y Libertad son los elementos por los que la conducta de los nacionalistas salvadoreños debe ser seguida.
En ARENA creemos en el sistema Democrático, Republicano y Representativo, que garantice la libertad de acción y consecución de fines pacíficos del individuo, siendo la vía más rápida y estable para lograr el desarrollo integral de la nación, creando así condiciones sociales adecuadas y elementos indispensables para el buen funcionamiento del país.
Estamos convencidos que el Estado no es un fin en sí mismo, sino el medio para el engrandecimiento y superación del individuo.
Como objetivo, tenemos que defender nuestras tradiciones occidentalesante agresiones permanentes que pongan en peligro la vida Institucional de El Salvador, adoptando para esto tres principios: Nacionalismo, Democracia y Libertad. Pero,… ¿y la ideología?
En ARENA reafirmamos el nacionalismo como la ideología que nos garantizará la estructura social adecuada a nuestro pueblo. Entendiéndose como el ideal de un pueblo que aspire a tener política propia, tener un Estado propio que se componga de todos sus connacionales.
Muchos piensan que las ideologías han llegado a su fin o que deben de quedar atrás. Pero, definamos, ¿qué es ideología? Se entiende como un conjunto de ideas o nociones que se relacionan entre sí, es la combinación de ideas con puntos en común que representa una postura.
El ser humano es un actor con actividad política permanente, por lo que creer que la ideología llegó a su fin es un error. El mismo error que se cometió en 1989 con la caída del Unión Soviética, ya que, para muchos filosóficos o pensadores políticos, la ideología había llegado a su fin.
En ARENA creemos en el sistema democrático, republicano y representativo que garantice la libertad de acción del individuo; reafirmamos el nacionalismo como ideología que nos garantizará la estructura social adecuada a nuestro pueblo"
El ser humano siempre estará movido por ideologías, aunque estas puedan ser más o menos claras. Por lo que, llegar a un consenso de manera colectiva por medio del dialogo, la principal herramienta fortalecedora de la democracia es la clave para sociedades prósperas.
Siempre habrá cantidades de aportaciones o posturas distintas, esto es algo natural del ser humano. Los cambios son inevitables y constantes, la oposición objetiva es imprescindible para la democracia de un país/Estado soberano.
Se escuchan voces diciendo que la ideología de la izquierda y la derecha han quedado atrás. Es un pensamiento totalmente errado; esas voces simplemente son una más de tantas ideologías, partiendo de su definición como“un conjunto de ideas con puntos en común que representan una postura”.
En ocasiones esas voces tienen carencia de dirección, identidad y tolerancia a la diversidad de pensamiento.
No se trata que mi postura sea la única correcta sobre la faz de la tierra, porque nadie es dueño de la verdad absoluta, se trata de hacer la elección de decisión más conveniente para beneficio colectivo de un país. Los jóvenes no estamos apáticos a la política, no es que ya no queramos saber de ideologías, porque estoy segura que ningún joven quiere ver fracasar su patria.
Difiero con los pensamientos como «la militancia es fiel a sus colores»; la militancia es fiel a sus principios y valores, por los que se sienten identificados en un instituto político y este es su propio éxito de una ideología.
Hay quieres se autodenominan de «X corriente política», en un tiempo donde las ideas polítivas se valoran poco y donde prevalecen los intereses personales por encima de los ideales, y son utilizados como propaganda política si suenan bien, son útiles para el «trending topic» o posicionan mediáticamente de cara a los medios.
No es que la ideología esté llegando a su fin, lo que estamos viviendo son tiempos de carencia de principios; lo que estamos viendo es que muchos van improvisando valores y moviéndose al que promueva mejores incentivos personales oscuros.
En ARENA, defendemos las libertades individuales, respetando la Constitución de la Republica de El Salvador y el principio de la legalidad. Los principios no se negocian y, si se negocian, nunca se tuvieron.
Gabriela Alas